WRC

El campeonato mundial de rallies o World Rally Car (WRC), es una competición amparada por la Federación Internacional de Automobilismo (FIA).

Al estar regulada por la FIA, esta obliga a que la base de los vehículos participantes en el WRC sea tomada de un automóvil de calle, del cual se hayan fabricado, por lo menos, 2500 unidades. Un vehículo que compite en el World Rally Car debe tener un peso mínimo de 1230 kilogramos y un motor de gasolina con cilindrada menor a 2.0 litros que desarrolle un máximo de 380CV. Se permite el uso de turbocompresor con sistema anti-retardo, tracción a las cuatro ruedas, diferenciales activos, caja de cambios secuencial y apéndices aerodinámicos.

Creado en 1973, el WRC es una batalla épica contra los elementos y el cronometro. Se distribuye en 13 rallyes, que cubren seis continentes y 15 países. El hombre y la máquina deben dominarlo todo, desde las pistas forestales llenas de nieve y hielo en frío intenso, hasta los pasos de montaña repletos de rocas con temperaturas abrasadoras.

Cada rallye cuenta con un número (en lo general entre 15 y 25) de secciones cronometradas, conocidas como tramos, en carreteras cerradas.

Los pilotos luchan uno a uno para completar estos tramos lo más rápidamente posible, con fracciones de tiempo de 1/10 de segundos. Un copiloto lee las notas detalladas que le indica el copiloto en las que se explican los peligros que vienen por delante.

Los competidores pilotan hacia y desde cada tramo en carreteras o pistas públicas, cumpliendo las normas de circulación de tráfico.

El equipo que complete todos los tramos en el tiempo acumulado menor es el ganador del rallye. Los puntos del WRC se asignan a los 10 primeros clasificados en base a 25-18-15-12-10-8-6-4-2-1 tanto en el campeonato de pilotos como en el de constructores.

Los rallyes siguen la misma estructura básica. Comienzan con dos días de reconocimientos de los tramos en los que los pilotos y copilotos pasan por la ruta a velocidad limitada para tomar las notas.

Los reconocimientos son seguidos por un shakedown el jueves por la mañana, un tramo de velocidad total que permite a los competidores una última oportunidad para poner a punto la configuración de su coche. 

El rallye propiamente dicho comienza el jueves por la noche, normalmente con una breve super especial que es la preferida por los aficionados, dado que se realiza en un estadio o por las calles de la ciudad anfitriona.

La competición continúa durante los tres días siguientes, antes de terminar el domingo a mediodía con el Power Stage que cierra el rallye. Este tramo ofrece puntos de bonificación para los cinco pilotos más rápidos y se transmite en directo por televisión a todo el mundo.

Los competidores visitan el parque de asistencia a horas predeterminadas para permitir que los técnicos de los equipos realicen los trabajos mecánicos en sus coches. Normalmente hay tres sesiones de asistencia en un día:

  • Una asistencia inicial de 15 minutos por la mañana antes del primer tramo.
  • Una asistencia de 40 minutos a mitad del día de competición
  • Una asistencia de fin del día de 45 minutos en la que se preparan los coches para el día siguiente.

La asistencia se aplica estrictamente, existiendo penalizaciones de tiempo si un competidor excede el tiempo asignado dentro de la asistencia. Al final de cada día de competición, los coches se guardan en un parque cerrado durante la noche sin acceso para los miembros del equipo ni para los competidores.

Fuera del parque de asistencia, sólo el piloto y copiloto pueden trabajar en su coche, utilizando únicamente las herramientas y piezas de repuesto que se llevan a bordo.

Se incurre en penalizaciones si los competidores llegan tarde a los puntos de control localizados en, por ejemplo, salidas de tramos y en la entrada y salida del parque de asistencia.

Los competidores que abandonen por problemas mecánicos o accidentes podrán volver a arrancar al día siguiente, siempre que su coche sea seguro para continuar. Por cada tramo no disputado después del abandono, un competidor incurre en una penalización de 10 minutos, que se añadirá al tiempo de tramo más rápido registrado por una tripulación en su categoría técnica.

Una de las carreras más míticas de este campeonato es el famoso Rallye de Montecarlo, que suele celebrarse en el mes de enero de cada año.

El Campeonato del Mundo de Rallyes ha sido testigo de algunos de los pilotos más increíbles de la historia con nombres como: Ari Vatanen, Colin McRae, Markku Alén, Carlos Sainz, Sebastien Ogier, Michèle Mouton, o el más laureado de todos ellos Sebastien Löeb.

Nº Campeonatos del Mundo por piloto (actualizado a 2019)

Por último cabe señalar que historicamente han existido varias categorías o grupos participantes en el Mundial de Rallyes. De este modo, durante la década de los años 80, los reglamentos para el Campeonato del Mundo de Rallyes se basaban en los Grupos A, B y N. Y de entre los tres, el máximo exponente de la categoría eran los Grupo B, con un reglamento que permitía crear prototipos diseñados expresamente para los rallyes basándose en la fabricación de únicamente 200 unidades de calle y 20 unidades preparadas para homologar el modelo como Grupo B.

Así pues, en aquellas temporadas de competición las carreteras y tramos de tierra fueron el campo de batalla para las máquinas más bestiales e irracionales que jamás han participado en rallyes. Desgraciadamente, una serie de accidentes con víctimas mortales (tanto aficionados como pilotos) pondría fin a la que prácticamente todos los aficionados consideran la época dorada de los rallyes.

Pero antes de que esto sucediera, la FISA (ahora es la FIA) ya estaba planeando un sustituto para el Grupo B, el llamado Grupo S. A grandes rasgos, la esencia era la misma que la del Grupo B, la creación de prototipos destinados a los rallyes, pero con severas limitaciones de potencia y un aumento de la seguridad de los vehículos.

Para más info: https://www.wrc.com/es/